cirugía de juanetes Madrid

¿Tienes callos o durezas en los pies? Las molestias y el dolor generado a consecuencia del roce con el calzado, el suelo o el propio hueso pueden ser muy incómodos. Por regla general, cuando aparecen las durezas es porque existe un problema oculto como, por ejemplo, una deformación ósea. En nuestra clínica especializada en cirugía de juanetes en Madrid hemos atendido casos de pacientes con cierta tendencia natural al desarrollo de esas durezas debido a su piel, aunque lo normal es que se den en personas mayores, quienes tienen menos tejido graso, lo que da lugar a la formación de callosidades, que se encuentran a menudo en la planta de los pies o en el dorso de los dedos, aunque también se forman en los talones y en los bordes laterales de las uñas.

En Clínica Podosalud lo que hacemos para eliminar los callos y sus molestias es raspar la zona de la piel endurecida hasta conseguir retirarla por completo, aliviando el dolor. Aconsejamos así mismo el uso de una crema hidratante adecuada después de cada baño. De esta forma, la piel se mantendrá más elástica y no se agrietará, retrasando la aparición de durezas.

Tratar las callosidades sin acudir previamente al especialista puede convertirse en un grave error, ya que son síntomas evidentes de otros problemas que solo un podólogo sabrá interpretar examinando las extremidades inferiores del paciente. El uso de otros remedios como los caseros no solo no atacan la afección, sino que pueden empeorarla.

Igual de dolorosos y desagradables que los callos son los juanetes en los pies. Esa alteración estética de la articulación del primer dedo hace que el paciente vea limitada la funcionalidad de su extremidad inferior a consecuencia  del dolor y de la inflamación de la zona. Esa desviación puede acabar en artrosis o en una disminución del movimiento del dedo gordo. Para evitar males mayores en el futuro lo más eficaz es someterse a una cirugía de juanetes en Madrid. Consiste en eliminar el bulto lateral hasta recuperar la alineación de los dedos y su movilidad.

No es necesario esperar a que nos duela para acabar con el problema de raíz. Cuanto antes se detecte la afección, menores serán las consecuencias para el paciente. Entonces, ¿por qué esperar a que nos duelan los juanetes o las callosidades para tratarlos?